La inflación se ha convertido en un quebradero de cabeza del Gobierno y amenaza con trastocar sus planes económicos. Se trata de un mail muy difícil de gestionar por el Ejecutivo, puesto que se come la renta de hogares y empresas a una velocidad galopante. A pesar de las medidas para amortiguar una inflación disparada, la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha reconocido este lunes lo que ya parecía evidente hace semanas: “Está claro que tenemos que trabajar con un nuevo escenario de inflación más alta durante más tiempo a nivel internacional”.