Los candidatos Miguel Durán y Eugenio Ribón han confluido en la misma dirección. Ambos no consideran que sean válidos los votos por correo que se realicen en la modalidad del evento de la discoteca Pachá, organizado por la candidatura de José María Alonso en 2017 para presentarse «en sociedad».
En aquel entonces, consiguieron concentrar a más de 1.500 personas en un evento multitudinario que tenía «truco»: la presencia de 5 notarios que facilitaron el voto por correo para esta candidatura y que tuvo su peso en el resultado final.
Un evento que la candidatura de Raúl Ochoa va a repetir mañana a las 20 horas en la misma discoteca, repitiendo con 4 notarios, para facilitar el voto por correo de todos aquellos que quieran apoyarlos en las urnas.
Algo que Miguel Durán, primero, y Eugenio Ribón, después, consideran que no es legal.
Porque el voto tiene que ser directo y secreto.
De ahí que Durán dirigiera, hace cuatro días, un escrito a la Comisión Electoral del Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM) solicitando que se prohiba, de forma expresa, que las sedes de las candidaturas o las de cualquiera de los candidatos puedan ser usadas como domicilios desde los que se transmita de forma masiva los votos por correo.
Y si eso sucediera, pide que todos esos votos se declaren nulos.
«Nos referimos, concretamente, al hecho de que alguna o algunas candidaturas concurrentes pudieran estar convenciendo a algunos votantes para que el domicilio que éstos designaran fuera, precisamente, el de esas candidaturas; y ello, con la finalidad de que fueran luego esos candidatos quienes completaran la tramitación del voto por correo«, dice Durán en su escrito.
Ribón, por su parte, considera que la gestión centralizada y masiva del voto por correo supondría una delgación del voto, prohibida en los Estatutos del ICAM.
Y ha solicitado lo mismo que Durán a la Comisión Electoral.
«Compromiso Abogacía advierte que cualquier gestión centralizada y masiva ‘encubre una forma implícita de delegacón del voto, lo que está prohibido; y segundo, el voto deja de ser directo y secreto, pues queda en mano de los manipuladores su gestión y el conocimeinto del sentido del sufragio del colegiado», publicó ayer esta candidatura en un comunicado.
Lo paradójico es que Ribón –igual que Ochoa– en las elecciones de 2017, formando parte de la candidatura de Alonso, se beneficiaron de los votos que se captaron en Pachá y que después le dieron la vitoria a Alonso.
