• 20/04/2024 03:16

La abogada Ana I. Rodríguez ha renunciado en el último año a tres casos de turno de oficio por insultos, humillaciones y falta de confianza

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Cada vez son más los abogados que prestan servicio en el turno de oficio que denuncian malos tratos por parte de sus clientes como, por ejemplo, acoso, amenazas, humillaciones e, incluso, algunos han tenido que solicitar una orden de alejamiento, como ha sido el caso de una letrada de Madrid y otro de Burgos. Esta situación también la ha vivido la abogada toledana Ana I. Rodríguez, que además de ejercer en libre designación, también es letrada del turno de oficio.

En el último año ha tenido que renunciar a tres casos tanto en el juzgado como al Colegio de Abogados de Toledo. Los motivos son claros: falta de confianza, humillaciones e insultos en casos que, incluso, ha ganado. A estos tres se le suma un cuarto que tuvo lugar en años anteriores.

Pero ha manifestado a Confilegal que estas situaciones, desgraciadamente «no son hechos aislados, pero muchas veces los abogados, o no le damos importancia o no le damos publicidad».

Pero lo que le ocurrió el pasado miércoles ha sido la gota que ha colmado el vaso, por lo que decidió expresar públicamente en su cuenta de Twitter la situación que viven diariamente en el turno de oficio. «Presente la renuncia, que a usted no la queremos como abogada», le decía su cliente en el proceso civil que ella le estaba llevando.

El turno de oficio no obliga a soportar faltas de respeto

Ha querido recalcar, una vez más, que ser abogado de oficio no obliga a soportar la falta de respeto, las voces ni la falta de confianza del cliente. «He tenido que aguantar humillaciones y que me digan que no me he estudiado el asunto, también que no me he leído los autos cuando son las 22:00 horas. No hay ninguna regla ni ninguna norma que obligue a que un abogado tenga que soportar esta situación, ni de turno de oficio, ni de libre designación».

Al fin y al cabo, lo más importante es la relación de confianza entre el abogado y el cliente, y si eso se pierde, es imposible llevar a cabo una defensa.

Por ello, automáticamente ha presentado un escrito tanto al juzgado para solicitar la renuncia como al Colegio de Abogados de Toledo al que ha pedido amparo.

«El turno de oficio es algo precioso y muy digno para cualquier abogado pero estas cosas se deben de denunciar y de poner de manifiesto porque los abogados estamos para defender los intereses de nuestros clientes, no para soportar estas humillaciones», ha explicado enfadada.

Una vez más, denuncio que los abogados del turno de oficio no estamos obligados a soportar faltas de respeto, humillaciones y falta de confianza por parte del cliente que nos ha sido designado. Los abogados y el TO merecen el debido respeto. Aquí resumo, no pude el vídeo entero. pic.twitter.com/gXk7wpFITj

— Ana I Rodríguez (@AirLawyers) November 23, 2022

El vídeo ha sido apoyado por un sinfín de letrados que se han sentido identificados con Ana I. Rodríguez. “No te imaginas como te comprendo, por esto mismo que dices y por la miseria que se cobra, me di de baja” o “es necesario explicar que un abogado de oficio no es un abogado de segunda”.

En los comentarios, una persona que dice ser el cliente de la abogada le ha respondido explicándole que ha sido ella la que le ha llamado con mal tono y sin modales, que es una ilusión que se ha montado ella en su cabeza y que “ojalá le hubiera grabado para denunciar”.

En otro post arremetió contra el horario de trabajo. “Lo de quedarte hasta las 22:00 horas no presumas que es de trabajar. Supongo que habrás hecho lo que debas hacer para salvar tu trasero y quedar bien en el pollo que has montado”.

Posteriormente el presunto cliente ha procedido a borrar la cuenta.

Pero esto no ha acabado aquí. A día de hoy Confilegal ha podido saber que la abogada está recibiendo continuos mensajes tanto a su número personal como al de trabajo diciéndole que no les ha atendido debidamente.

Otros casos

Hace unos meses, se vio obligada a renunciar a un caso porque un cliente llamó a su despacho y, tras responderle que en esos momentos no podía hablar, éste insistió y llamó a su secretario diciéndole que la letrada le estaba mintiendo y que era «un hijo de puta». Mi trabajador se quedó desarmado e hizo muy bien en colgar el teléfono.

También ha recordado un asunto en el que se le designó a un individuo para un procedimiento penal. «Me llamaba constantemente en un tono fuerte y brusco y me decía que yo no me enteraba de nada, le expliqué que no podía seguir atendiéndole de esa manera y todavía se alteraba aún más, e incluso me enviaba mensajes por WhatsApp».

En otro caso de turno de oficio tuvo que llamar incluso a la policía. El cliente quería solicitar una indemnización y aunque el asunto se ganó en primera y segunda instancia, él no estaba conforme con el fallo. Pero dicha indemnización no era posible solicitar.


Artículo de Blanca Valdés publicado en https://confilegal.com/20221125-la-abogada-ana-i-rodriguez-ha-renunciado-en-el-ultimo-ano-a-tres-casos-de-turno-de-oficio-por-insultos-humillaciones-y-falta-de-confianza/