8M – Isabel Winkels: ¿Han conseguido las mujeres romper el «techo de cristal» en el sector legal?

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Isabel Winkels

Vamos a empezar con la parte positiva: se han producido avances incuestionables. En todas las ramas del Derecho, y en las diferentes formas de ejercer la profesión -desde los despachos medianos o grandes, a la abogacía de empresa- podemos encontrar mujeres abogadas en puestos de liderazgo, marcando el camino

En el campo conocido como ‘legal tech’, o derecho digital, hay decenas de abogadas que son una referencia en cuestiones como la regulación de la Inteligencia Artificial o el Blockchain, en una era en la que la tecnología está cambiando la actividad económica, las inversiones y la financiación.

También en la sostenibilidad, unos de los grandes retos que enfrentan las empresas, las Administraciones y los ciudadanos, encontramos a mujeres abogadas con visión de futuro, impulsando lo que será una de las principales innovaciones de los años venideros.

Lo mismo sucede en campos tan sensibles para las personas y para la sociedad, como es el Derecho de Familia, dónde somos mayoritariamente las mujeres abogadas quienes estamos promoviendo cambios y avances tan necesarios como la especialización de los juzgados, por citar uno de los desafíos más perentorios.

En definitiva, si buscamos a nuestro alrededor encontramos decenas de ejemplos de mujeres que no solo han roto, sino que han hecho añicos, con su talento y trabajo el tópico del techo de cristal, ejemplos que debemos reconocer, mostrar y compartir. De hecho, en esta semana de la mujer se celebran multitud de eventos y reconocimientos a mujeres pioneras en cada materia, como en la Mesa que organiza la UICM y que tengo el honor de moderar, con Amelia Valcárcel, Consuelo Madrigal, Amaya Mendikoetxea, María Fernandez Rey, Begoña Villacis y Val Díez Rodrigálvarez, mujeres con nombre propio todas ellas. Solo así abriremos camino.

De hecho, todos los Colegios profesionales podemos hacer mucho en este terreno. En el ICAM, en un ambicioso programa de 8 medidas, tenemos previsto, entre otros, programas específicos de formación y de mentoría, en los que abogadas consagradas puedan apoyar a las jóvenes que acceden a la profesión, o un programa de orientación para mujeres emprendedoras. Vamos a crear Observatorios de Igualdad y de brecha salarial, y a elaborar una Guía de Mujeres Juristas para periodistas, de modo que los medios de comunicación tengan más fácil recurrir a abogadas expertas como fuentes de las informaciones o como autoras de análisis especializados sobre cuestiones de la actualidad jurídica.

Con todo, muchas mujeres encuentran todavía obstáculos a los que hacer frente y dificultades para explotar todo su potencial. Disponemos de numerosos estudios que han analizado esta realidad. Uno de los más recientes es el presentado a finales de 2022 por la International Bar Association (IBA), que ponía en evidencia que solo el 31% de los puestos de responsabilidad en el sector legal están ocupados por mujeres a pesar de que somos mayoría en la profesión (54%).

Aunque con datos diferentes en distintos países, es una realidad que afecta a todo el territorio de la UE, lo que hizo que el Consejo Europeo aprobara el pasado 17 de octubre el texto definitivo de la Directiva relativa al equilibrio entre hombres y mujeres en los consejos de administración de las empresas. Esta norma establece que, para 2026, al menos el 40% de los puestos de administradores no ejecutivos en las empresas que cotizan en bolsa deberán estar ocupados por miembros del sexo menos representado. Termino con una frase de Viviane Reding, la primera comisaria de justicia de la UE el año 2012 «I don’t like quotas but I like what quotas do» («no me gustan las cuotas pero sí lo que consiguen»).