El penalista Raúl Pardo Geijo se desplazará a la ciudad de Birmingham en este mes de diciembre al ser premiado por la prestigiosa editorial “Spain Prestige Awards”.
Reconocido casi un centenar de veces por su ejercicio como abogado penalista por un amplio conjunto de organismos nacionales (AEDECC, EIP, LA LEY, SUPLEMENTO, F.E. CUM LAUDE, EXCELENCIA JURÍDICA, AENT o CARLOS III), en el ámbito internacional sobresale –si no igual– aún más.
Galardonado hace escaso días por “Law Eagles Of America” y “Lawyers of Distinction” (organismos de Estados Unidos) ya lo fue en meses anteriores otras de las instituciones más relevantes del Derecho: “Global Law Experts”, “Advisory Excellence”, “The Lawyer Network”, “Leaders in Law”, “Lawyer International-Legal 100”, “Client Choice” o la mismísima “Best Lawyers” (editorial jurídica más antigua) que lo reconoce al murciano como el mejor abogado del país.
Sus elevadas capacidades jurídicas, la solvencia en el manejo del lenguaje verbal y escrito o su capacidad de concisión y precisión jurídica, además de su habilidad para saber cuándo actuar en el curso del procedimiento han hecho de este penalista de Murcia un indiscutible dentro de la abogacía española, hasta el punto de ser introducido entre las 25 personalidades más importantes del Derecho y de las 500 más influyentes a nivel nacional.
Hijo de José Pardo, otra leyenda murciana del derecho penal, Raúl Pardo pasa más tiempo fuera que dentro de la propia Región. Son conocidas constantes actuaciones en Madrid, en la sede de la Audiencia Nacional o Tribunal Supremo pero, también, por toda España, pues participa en la mayor parte de los casos de trascendencia nacional.
Con un record de absoluciones en los delitos tráfico de drogas no se le quedan atrás los de ámbito económico (estafas o apropiaciones) o de corrupción política o funcionarial (Púnica, Malaya o Gurtel), estando actualmente presente en los mayores fraudes realizados en las ciudades de Ceuta y Melilla. En la primera, defendió a los trabajadores del ente público Emvicesa acusados de la mayor trama de corrupción de la ciudad en toda la historia y, en la segunda, está representando, entre otros, al Consejero de Medio Ambiente en la más que conocida operación “Santiago-Rusadir”.
Sea o no el mejor abogado de España, o de Murcia, lo que es claro es la dificultad que tienen los medios de comunicación para realizarle entrevistas acerca de sus casos u otros ajenos (ha rechazado en innumerables ocasiones participar en tertulias televisivas por considerar que no se debe opinar de temas ajenos), siendo igual de complicado seguir por la prensa el estado de sus asuntos judiciales o el contacto con alguno de sus relevantes clientes por razón del secretismo que tiene respecto de las causas que defiende.