Ana Tuñas Matilla
El visón europeo está en peligro crítico de extinción y entre las amenazas a las que debe hacer frente está el visón americano, especie invasora llegada a Europa de la mano de la industria peletera con la que comparte nicho ecológico y que le está ganando la batalla porque es más fuerte, tiene más capacidad de reproducción y le transmite enfermedades para las que no está «vacunado».
Sin embargo, frenar a esta especie exótica es posible y así lo están constando en el País Vasco francés mediante la aplicación del mismo sistema usado en España y basado en la colocación en los ríos de unas balsas diseñadas específicamente para atraerlos y en las que, tras constatar que hay ejemplares presentes en una determinada zona, se colocan trampas para atraparlos.
En total, han instalado 260 balsas en los ríos Nive y Nivelle, compartidos entre España y Francia y por los que estaban entrando visiones americanos a Navarra y Guipúzcoa, ha explicado a EFEverde el responsable del proyecto Julien Jaureguy, experto de la organización ambiental MIFENEC.
España dio la voz de alarma a Francia
La lucha contra el visión americano en el País Vasco francés comenzó en 2017, en territorio de los ríos Errobi y Urdazuri, después de que desde España alertaran de que estaban capturando en Navarra y Gipuzkoa visones americanos procedentes del norte.
Fue entonces cuando la Communauté d’Agglomération Pays Basque (CAPB) decidió pasar a la acción y, con el apoyo financiero del contrato Natura2000 y fondos Feder y estatales, puso en marcha un plan para luchar contra el visón americano.
Esta especie ha logrado establecerse en Europa tras escapes o sueltas intencionadas desde las granjas que se crearon para suministrar a la industria peletera, ahora también en declive.
Este mustélido comparte nicho ecológico y hábitat con el visón europeo, al que está desplazando porque le supera en tamaño y agresividad y porque se reproduce mucho más rápido (las hembras de visón europeo son fecundas sólo 1 día al año y tiene 1 o 2 crías por embarazo, frente a los 5 a 7 de una americana).
Además, ejemplares sanos pueden ser portadores de enfermedades que en el caso del visón europeo son mortales, pues su cuerpo no está preparado para combatirlas.
Éxito de capturas
El plan fue encargado a la organización protectora del medio ambiente MIFENEC, que, en colaboración con GREGE, para atrapar a los invasores optó por utilizar unas plataformas flotantes con un «túnel», diseñadas para atraer a los visones americanos, que las usan a modo de troncos flotando en el agua, e inocuas para otras especies.
Cartel informativo que acompaña las plataformas flotantes. EFE/ JJ Guillén
Para saber si en una zona determinada hay visiones, en el interior de las balsas se coloca un bloque de arcilla en el que todo animal que pase dejará impresas sus huellas.
Cuando se constata que hay visiones, las balsas se equipan con trampas para atraparlos. Al tratarse de una especie catalogada como exótica invasora, estos animales son sacrificados.
En sólo dos meses, capturaron mediante este sistema, ideado por biólogos y especialistas en fauna durante diferentes proyectos, unos 40 ejemplares en la cuenca alta de la Nive, por lo que extendieron el proyecto a más zonas de este río y de la Nivelle, zonas en las que también se cree que subsisten poblaciones de visones de Europa.
La lucha está siendo un éxito, pues frente a los 160 visiones americanos capturados en los seis años precedentes, en el último año sólo han atrapado 2 en la parte alta de la Nive y una media decena en la parte baja del río y en la Nivelle, ha subrayado Jaureguy.
Además, los expertos navarros y guipuzcoanos no tienen constancia de la llegada a sus territorios de nuevos ejemplares procedentes del norte, ha apuntado el experto de la empresa pública Gestión Ambiental de Navarra (GAN-NIk) Fermín Urra, que ha subrayado que se trata del método más eficaz para acabar con el visón americano, enemigo también de armiños, ratas de agua, desmanes o aves.
Así se colocan las jaulas en las plataformas flotantes para capturar visones americanos. EFE JJ. Guillén
Por eso y porque, además, son prácticamente inocua para otras especies, pues no sienten el menor interés por estas plataformas, llevan años usándolas en los ríos españoles.
Tras comprobar su eficacia y pese a que el estudio finaliza en 2024, en el País Vasco francés también continuarán los trabajos de captura de visón americanos y de protección del visón europeo, en paralelo con el proyecto de renaturalización de ríos Life Kantauribai, con cuyos socios ya colaboran en su intento de ayudar a la icónica especie endémica del Viejo Continente. EFEverde
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