La crisis climática es una de las mayores amenazas a las que se enfrenta la humanidad y la vida en la Tierra. Sus efectos se extienden por el planeta, alterando ecosistemas, forzando migraciones y afectando la salud de millones de personas.
En este contexto, los medios audiovisuales han demostrado ser herramientas muy poderosas para generar conciencia, sensibilizar y movilizar a la población frente a esta problemática urgente.
En España, los últimos 30 años han mostrado una evolución notable tanto en el consumo de contenidos audiovisuales como en la crisis climática, permitiendo una sinergia única entre ambos fenómenos.
Consumo de audiovisual y su evolución
El consumo de contenidos audiovisuales ha experimentado un cambio radical en las últimas tres décadas.
En los años 90, la televisión era el medio predominante en España, con un promedio de consumo en torno a tres horas diarias. La llegada de las plataformas digitales, los dispositivos móviles, las televisiones inteligentes y las tabletas ha transformado esta dinámica.
Según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), en 2023 el consumo audiovisual promedio entre los españoles asciende a casi cuatro horas diarias. La mayor parte de este tiempo es consumido en dispositivos como móviles (especialmente entre los jóvenes) y televisiones inteligentes, que han desplazado parcialmente a los televisores tradicionales.
En cuanto a las franjas de edad, los jóvenes de 16 a 24 años han aumentado notablemente su consumo de contenidos a través de plataformas como YouTube, Netflix y TikTok, entre otras, dedicando hasta 3,5 horas diarias de promedio a estos servicios.
Los adultos de entre 35 y 55 años mantienen un consumo más equilibrado entre la televisión tradicional y las plataformas de streaming, mientras que los mayores de 65 años siguen siendo el grupo más fiel a la televisión convencional.
Este panorama de consumo diversificado permite un acceso más amplio a contenidos audiovisuales que abordan temáticas como la crisis climática, adaptándose a diferentes audiencias.
El impacto de la crisis climática en España
Los efectos del cambio climático en España son cada vez más evidentes. Entre 1990 y 2020, la temperatura media en el país ha aumentado en 1,5°C, un ritmo superior al promedio global.
Este calentamiento ha tenido un impacto directo en la salud humana y de otros seres vivos. Según la Agencia Española de Meteorología (AEMET), las olas de calor se han duplicado en los últimos 30 años, lo que ha incrementado la mortalidad por enfermedades relacionadas con el calor, afectando principalmente a los ancianos y personas con enfermedades crónicas.
Además, el cambio climático ha alterado los ecosistemas naturales y urbanos. La desertificación avanza en zonas como Andalucía y Castilla-La Mancha, afectando la biodiversidad y la agricultura.
Las ciudades españolas se enfrentan un aumento de las temperaturas, lo que ha impulsado la necesidad de adaptar la infraestructura urbana para hacer frente a las «islas de calor» y mitigar las emisiones.
En términos de fauna, especies emblemáticas como el lince ibérico o el águila imperial ibérica, ya en peligro, se ven aún más amenazadas por la pérdida de su hábitat y la alteración de los ciclos biológicos.
La influencia del audiovisual en la conciencia ambiental
A medida que la crisis climática ha avanzado, el contenido audiovisual ha reflejado esta urgencia. Diversos estudios científicos han señalado la capacidad del cine y la televisión para cambiar percepciones y generar conciencia.
La doctora en comunicación ambiental, escritora y activista costarricense, defensora de un transporte libre de emisiones, Mónica Araya, subraya que “los medios audiovisuales tienen un poder transformador único: pueden conectar emocionalmente a las audiencias, lo que es fundamental para movilizar a la acción”.
Esta conexión emocional es clave en la sensibilización frente a temas como el cambio climático, ya que las imágenes y relatos audiovisuales logran representar de manera tangible y cercana las consecuencias de la crisis.
Ejemplos de este tipo de contenidos abundan en la historia del Festival. Documentales como “Una verdad incómoda” de Al Gore o “Santuario” de Javier Bardem, entre muchos otros estrenados en SUNCINE, han tenido un impacto global en la sensibilización sobre la crisis climática, contribuyendo a visibilizar las urgencias ecológicas globales desde una perspectiva planetaria y local.
El medio ambiente está en tus manos
En España, un referente clave en la difusión de contenidos audiovisuales ambientales es el SUNCINE, el Festival Internacional de Cine del Medio Ambiente.
Este festival, el más antiguo del mundo en su género, ha sido pionero en la promoción de producciones cinematográficas y documentales que abordan la crisis climática.
Desde su creación, ha generado sinergias entre televisiones y distribuidoras cinematográficas, facilitando la inclusión de películas y documentales sobre temas ambientales en las parrillas televisivas y las plataformas de streaming.
Desde la pandemia, SUNCINE ha adaptado su modelo de festival a las nuevas tecnologías, sin renunciar y manteniendo viva la gran pantalla, proyectando en salas de cine de Barcelona y otras ciudades del país y el mundo, permitiendo que su contenido esté disponible en su propia plataforma APP SUNCINE de forma gratuita y en otras plataformas externas de calidad cultural como CaixaForum+, haciendo accesible el mejor cine ambiental a cualquier ciudadano español con un canal dedicado durante todo el año.
A nivel local, en Cataluña, el festival está presente durante y después del evento a través de plataformas 3CAT y Xarxa+, lo que permite una mayor difusión y visibilidad de estas producciones en lengua catalana.
Gracias a estos esfuerzos, el audiovisual ambiental no solo está disponible en grandes eventos presenciales, sino que ahora forma parte del día a día de millones de personas a través de los dispositivos: “el medio ambiente está en tus manos”, es la mejor manera que he encontrado para definir esta dualidad.
Fomentando la acción ambiental a través del audiovisual
El audiovisual no solo tiene el poder de sensibilizar, sino también de inspirar la acción. Espacios y programas que promueven una educación ambiental han demostrado ser efectivos para movilizar tanto a jóvenes como adultos para adoptar cambios en su vida cotidiana.
Desde pequeñas acciones, como el reciclaje y el ahorro de agua, hasta la participación en movimientos globales como Fridays for Future, el audiovisual ha sido una herramienta clave para generar y mostrar estas respuestas.
La integración de la educación ambiental en todos los aspectos de la vida es crucial para crear una sociedad más consciente y activa frente a la crisis climática.
Iniciativas como SUNCINE no solo informan sobre los problemas, sino que también muestran soluciones aplicadas en otras partes del mundo, inspirando a las audiencias a actuar.
Ejemplos como la reforestación en Costa Rica o la gestión de residuos en Suecia son historias que el cine ambiental ha traído a la pantalla, demostrando que el cambio es posible.
A más horas de consumo, mejores contenidos
El papel del audiovisual en la sensibilización frente a la crisis climática es innegable y resulta vital en los tiempos que corren.
En un momento en que la crisis ambiental alcanza niveles alarmantes, el cine, la televisión y las nuevas plataformas digitales ofrecen una ventana vital para educar, sensibilizar y movilizar a la sociedad.
Programas, documentales y festivales como SUNCINE han mostrado la importancia de estas producciones en la promoción de una conciencia ambiental que trascienda generaciones y que impulse a la acción ciudadana, aumentando la presión sobre los gobiernos y entes supranacionales que se demoran en tomar medidas y decisiones urgentes.
Es fundamental que se aumente el apoyo y la inversión en la industria audiovisual y en la producción de contenidos ambientales y que las instituciones públicas promuevan su inclusión en programas educativos.
La televisión pública, en particular, tiene un papel clave que desempeñar en la creación de espacios dedicados a la crisis climática, abordando este tema desde una perspectiva constructiva y positiva.
El audiovisual, como herramienta de sensibilización, tiene el poder de “educar entreteniendo y concienciar sensibilizando” (lema del SUNCINE), ofreciendo soluciones para enfrentar un problema que, al fin y al cabo, nos afecta a todos en esta casa común que es el planeta.
(*) Claudio Lauria es fundador y presidente de SUNCINE.
Creadores de Opinión Verde #CDO es un blog colectivo coordinado por Arturo Larena, director de EFEvhttps://efeverde.com/prohibicion-uso-fueloil-aguas-artico/erde
Esta tribuna puede reproducirse libremente citando a sus autores y a EFEverde.
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