Brasil y Estados Unidos se han convertido en los últimos tiempos en los mayores catalizadores del resultado de Iberdrola. Y todo parece indicar que la tendencia seguirá: la filial de la eléctrica española en el gigante sudamericano, Neoenergia, se adjudicó el jueves su mayor proyecto de redes en el mundo en una subasta celebrada por la Agencia Nacional de Energía Eléctrica brasileña (Aneel). Será una línea de 1.707 kilómetros entre los Estados de Minas Gerais y São Paulo por la que percibirá 5.500 millones de reales (algo más de 1.000 millones de euros al cambio actual), una vez sumada otra adjudicación de 291 kilómetros en Mato Grosso do Sul. La construcción de ambas permitirá, según los cálculos de la empresa, la creación de 11.000 empleos.