Las consecuencias de las medidas anunciadas la semana pasada por el Banco Central Europeo (BCE) sobre la inminente subida de los tipos de interés, junto al dato de inflación de Estados Unidos, continúan haciendo mella en la confianza de los mercados europeos. La caída persiste tras el ‘viernes negro’ de esta pasada semana y con el miedo a una recesión muy presente.
Bajo este clima, el mercado espera una subida de 50 puntos básicos de los tipos de interés de la Reserva Federal de Estados Unidos en la reunión de esta semana, después de conocerse que la inflación del país norteamericano repuntó hasta el 8,6% en mayo y vuelve a situarse en máximos desde 1981. Además, esta semana también se reunirá el Banco de Inglaterra, que podría anunciar nuevos incrementos de tipos.
El Ibex 35 respondió el viernes con un desplome del 3,68%, el mayor hundimiento desde el inicio de la guerra, y hoy ha continuado la tendencia a la baja con una caída del 1,89% a media sesión, situándose en los 8.231,7 puntos, mientras que la prima de riesgo española ha aumentado hasta los 129 puntos básicos. La rentabilidad del bono español con vencimiento a diez años se sitúa en el 2,888% frente al 1,569% del bono alemán, lo que supone una diferencia de 131,9 puntos, la más pronunciada desde mayo de 2020.
En este escenario, solo cotizaban en positivo en el parqué español Naturgy (+1,22%) y Red Eléctrica (+0,8%), mientras que las caídas más pronunciadas en la media sesión las han experimentado Meliá (-5,08%), Bankinter (-5,03%), Sabadell (-4,48%), Fluidra (-4,43%), PharmaMar (-4,24%), CIE Automotive (-3,98%) y Colonial (-3,72%).
El resto de Bolsas europeas también han presentado caídas en la media sesión: del 1,88% en Londres, del 2,35% en París, del 2,25% en Fráncfort y del 2,32% en Milán.
Por su parte, el precio del barril de crudo Brent, de referencia para Europa, se situaba en 120,24 dólares, con un descenso del 1,47%, mientras que el barril de petróleo WTI, de referencia para EE.UU., caía un 1,58%, hasta los 118,77 dólares. Además, la cotización del euro frente al dólar se colocaba en 1,0466 ‘billetes verdes’.
Por otro lado, el índice compuesto de indicadores líderes (CLI), que sirve a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) de ‘termómetro económico’ para detectar cambios de tendencia, sugiere una pérdida de impulso del crecimiento de las economías avanzadas en los próximos meses, frente al que la economía española ofrece síntomas de estabilización.
