Carlos Capa
Emilio Muñoz Estévez
Emilio Muñoz Estévez, empresario, emprendedor e inversor español, falleció en Madrid el pasado 18 de diciembre a los 86 años de edad. Nacido en Sevilla en 1939, desarrolló la mayor parte de su vida personal y profesional en la capital, donde dejó una impronta notable gracias a su carácter inquieto, su olfato para los negocios y su inagotable energía emprendedora
Con más de setenta y cinco años de trabajo a sus espaldas ( no es una exageración) Emilio Muñoz recorrió con singular éxito sectores tan diversos como el comercio, la hostelería, la decoración o la promoción inmobiliaria. Su trayectoria profesional se caracterizó por una mentalidad abierta a la innovación y una forma muy personal de entender la gestión empresarial, guiada por un principio que resumía su filosofía vital y profesional: «El no no existe», título de sus memorias, que tuve el honor de escribir junto a él.
Hombre hecho a sí mismo, Muñoz construyó su carrera a base de esfuerzo, tenacidad y una confianza inquebrantable en el valor del trabajo bien hecho. Su ejemplo inspiró a varias generaciones de emprendedores y colaboradores que supieron apreciar su cercanía, optimismo y capacidad para convertir cada reto en una oportunidad.
Casado durante más de medio siglo con Alicia Lombardía, deja tras de sí una familia unida —dos hijas y cuatro nietos— y un legado de talento, constancia y pasión por los proyectos que emprendió.
Emilio Muñoz Estévez será recordado no solo por su éxito profesional, sino por su vitalismo y su fe en el esfuerzo como motor de progreso personal y colectivo, pero sobre todo, por su tremenda humanidad y sensibilidad, que no sabía disimular. Descanse en paz.
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