Entre enero y abril de 2025, Colombia registró 123 feminicidios, 79 tentativas de homicidio y 19 asesinatos contra personas OSIEGD y LGBTI, evidenciando la urgencia de reforzar las acciones de protección y justicia.
La iniciativa se presentó luego de la condecoración que el Congreso de la República le confirió a Martín Mestre, símbolo de una lucha de tres décadas para obtener justicia en el crimen de su hija, ocurrido en Barranquilla el primer de enero de 1994.
El Senador y expresidente del Congreso Efraín Cepeda radicó un proyecto de ley para que el delito de feminicidio no prescriba y se puedan extender las investigaciones por esta conducta criminal contra las mujeres.
Mestre se dedicó a ubicar y ayudar a las autoridades para que capturaran y pusieran ante la justicia al autor del asesinato de su hija, quien, incluso, salió del país para evadir a las autoridades.
Tras esta lucha, el Senado le confirió al señor Mestre la Orden del Congreso de Colombia en el grado de Caballero, en una ceremonia encabezada por el Senador Cepeda.
La historia de Mestre “es símbolo de resistencia y fortaleza, representación de tantas familias que han sufrido la violencia en Colombia”.
Mestre es “un hombre que convirtió el dolor más profundo en una causa de justicia y esperanza”, y que “durante tres décadas, con una fe y perseverancia incansables, logró que el responsable de este terrible feminicidio finalmente fuera capturado y traído a Colombia”, añadió.
Tras la condecoración, el Senador Cepeda radicó el proyecto de ley que busca declarar imprescriptible el delito de feminicidio.
El congresista explicó que esta iniciativa responde a las alarmantes cifras de violencia contra las mujeres en el país: en 2023 -según él- fueron asesinadas 971 mujeres; en 2024, la cifra ascendió a 988; y en lo corrido de 2025, hasta junio, ya se han registrado 362 casos.
Al respecto, Cepeda aseguró que el objetivo de la iniciativa es que “ningún crimen contra las mujeres quede sin justicia por el paso del tiempo. Este es un homenaje a Nancy (Mestre) y a todas las víctimas de feminicidio en Colombia. No podemos permitir que la prescripción se convierta en otro obstáculo para alcanzar justicia”.
El senador recordó además que, desde la entrada en vigor de la Ley 1761 de 2015, que tipificó el feminicidio, solo el 33% de los casos ha llegado a la etapa de ejecución de penas, mientras que el 67% restante permanece en indagación o juicio, lo que evidencia los amplios márgenes de impunidad.
El ciudadano Martín Mestre expresó su agradecimiento: “Hoy debo decir que tuve que envejecer para lograrlo. No quiero que otro colombiano o colombiana pase por esto. Por eso, con esta ley quiero que las víctimas puedan conseguir justicia, piedad y reparación, sin importar el paso de los años”.
Con esta iniciativa, conocida simbólicamente como la “Ley Nancy Mestre”, el Senado busca cerrar espacios de impunidad y garantizar que los crímenes de feminicidio nunca pierdan la posibilidad de ser juzgados, reafirmando el compromiso del Congreso con la verdad, la justicia y la defensa de los derechos de las mujeres.