• 17/11/2025 11:43

Gauss Fusion: ha llegado el momento de pasar del laboratorio a la ingeniería en fusión nuclear

(origen) Ana Tuñas Matilla Nov 17, 2025 , , , , , , , ,
Tiempo estimado de lectura: 3 minutos, 47 segundos

Ana Tuñas Matilla

Europa podría disponer de su primera planta comercial de fusión nuclear en 20 años, según la empresa Gauss Fusion, que considera que ha llegado el momento de pasar del laboratorio a la ingeniería, pues se han resuelto todas las trabas técnicas para hacerla posible, y que defiende que la iniciativa privada es la que debe tomar las riendas de su desarrollo.

Esta tecnología, considerada una fuente “inagotable” de energía, es nuclear, como la fisión -cuyo futuro vuelve a estar sobre la mesa en España-, pero presenta dos grandes diferencias: no hay riesgo de explosión ni genera residuos radiactivos que deban almacenarse durante miles de años.

Además, no emite dióxido de carbono, ha subrayado Frédérick Bordry, director de Tecnología de Gauss Fusion, fundada en 2022 por Alcen (Francia), Hofima/Familia Malacalza, filial de ASG Superproductores (Italia), IDOM (España) y Bruker EAS y RI Research Instruments (Alemania).

Cómo funciona

Mientras la fisión genera energía rompiendo átomos pesados —habitualmente uranio—, la fusión la produce uniendo átomos muy ligeros, generalmente dos isótopos de hidrógeno: deuterio (que puede extraerse del agua) y tritio (que se puede obtener del litio).

Esta tecnología genera cuatro veces más energía por kilo de combustible que la fisión y cerca de cuatro millones de veces más que la combustión del petróleo o el carbón, subrayó Bordry en una entrevista con EFEverde.

Como no presenta riesgo de explosión porque la reacción se detiene sola en caso de descontrol (evitando con ello una reacción en cadena que sí puede darse en fisión), una central podría ubicarse cerca de núcleos urbanos, donde además de la electricidad que genera se podría aprovechar el calor residual para la industria o la calefacción doméstica.

Lista para su desarrollo comercial

Tras relatar las bondades de esta tecnología, Bordry afirmó que están convencidos de que “es el momento de pasar de la investigación y la física a la ingeniería y lo comercial”, porque “ya se han resuelto todas las cuestiones que hacían inviable la fusión” y “ahora solo falta ensamblarlas”.

Para abandonar los combustibles fósiles y frenar el cambio climático, explicó, se necesitan renovables, pero también energías continuas que podamos controlar, descartando el almacenamiento masivo “porque aún no sabemos cómo hacerlo”.

Muchos países rechazan la fisión por los riesgos de accidente o los residuos radiactivos que genera, pero ahora “hay una nueva carta sobre la mesa: la fusión, que hay que jugar por el futuro”, ha subrayado.

Iniciativa privada

Si se apuesta por ella, a finales de siglo podría reemplazar a la fisión en el mix eléctrico, que, a su juicio, debería componerse entonces de un 30 % de fusión y un 70 % de renovables (eólica y solar).

En el transporte, añadió, será esencial el hidrógeno verde, cuya producción requiere gran cantidad de energía eléctrica libre de emisiones.

“Europa ha hecho el trabajo”, recordó Bordry, en referencia al proyecto ITER, el megacomplejo científico que busca demostrar la viabilidad de la fusión nuclear. “Ahora es el momento de la industria privada, que debe tomar la iniciativa para hacer de la fusión una tecnología viable a nivel comercial”.

Así sería

Con el objetivo de acelerar este proceso, Gauss Fusion ha elaborado el primer Diseño Conceptual (DCR) de una central eléctrica de fusión en Europa,  a la que han denominada GIGA, todo un hito que permite abrir el camino para llevar esta energía de la investigación a la realidad.

La planta diseñada por Gauss Fusion ocuparía una superficie de unas 100 hectáreas, similar a una central de carbón o de fisión de 1 gigavatio (GW) de potencia, y en su corazón albergaría un reactor Stellrator de 50 metros de diámetro basado en campos magnéticos, la tecnología elegida para que la elevada temperatura del plasma que se genera en la reacción (diez veces superior a la del Sol) no toque las paredes del reactor y lo destruya.

Para su ubicación, han identificado unos 500 posibles emplazamientos en España, Francia, Alemania, Italia, Dinamarca, Países Bajos o Suiza, especialmente antiguas centrales de carbón o de fisión nuclear.

Entre los requisitos básicos destacan la conexión a la red eléctrica, la disponibilidad de agua para refrigeración y la ausencia de actividad sísmica.

Si funcionara el 80 % del tiempo, podría generar al año 7 teravatios hora (TWh) -el equivalente al consumo de unos dos millones de hogares-, utilizando como combustible 150 kilos de deuterio y 150 de tritio (medio kilo de cada uno al día).

A diferencia del uranio, cuya radiactividad se mantiene durante 300.000 millones de años, el periodo de semidesintegración del tritio es de solo 12 años, y los materiales estructurales de la planta podrían reutilizarse durante 80 años.

¿Cuánto costaría?

Hacer realidad la planta implicaría una inversión inicial de entre 15.000 y 18.000 millones de euros, que podría reducirse con el tiempo hasta los 10.000 millones por las economías de escala que lograría una amplia cadena de suministro, y estaría operativa hacia mediados de la década de 2040.

Otro de los retos que aseguran tener resuelto es el abastecimiento de tritio, que no está presente en la naturaleza, pero puede producirse a partir del litio, que sí lo está en grandes cantidades.

Este isótopo se obtendría mediante un manto reproductor de tritio, que contiene litio y permite su producción dentro del propio reactor.

“Necesitamos energía para hacer funcionar la industria y el mundo. ¿Por qué vivimos bien? Porque hay energía; sin ella, la civilización se apaga”, según Bordry.

Lo que opinan ecologistas

Por contra, Ecologistas en Acción y Greenpeace han advertido de que invertir en el desarrollo de la energía nuclear de fusión podría poner en riesgo el despliegue renovable y el almacenamiento energético necesarios para frenar la crisis climática.

Según estas organizaciones, esta tecnología —que lleva décadas anunciándose— no llega a tiempo para frenar el calentamiento global, para lo que son prioritarias la solar, eólica, eficiencia energética y redes inteligentes.

Aunque teóricamente podría estar libre de emisiones y radiactividad, subrayan, aún hay muchas incógnitas sobre su impacto real: la huella de minerales críticos, el uso de agua o el impacto de la cadena de producción.

Además, advierten, dado el elevado nivel de inversión que requiere, al igual que la fisión, la fusión quedaría en manos de unas pocas empresas, perpetuando los oligopolios energéticos y dificultando una transición ecológica justa que sí permiten las renovables. EFEverde
atm /al

EFEverde
atm

El Congreso rechaza anular el calendario de cierre nuclear

La entrada Gauss Fusion: ha llegado el momento de pasar del laboratorio a la ingeniería en fusión nuclear se publicó primero en EFEverde.


Artículo de Ana Tuñas Matilla publicado en https://efeverde.com/gauss-fusion-ha-llegado-el-momento-de-pasar-del-laboratorio-a-la-ingenieria-en-fusion-nuclear/