Las elevadas cifras del coste del rescate bancario no deberían eclipsar el inmenso sacrificio que, para millones de personas, significaron las drásticas medidas del Memorando de Entendimiento (MoU) de 2012 acordado por el Gobierno del PP y la UE. Dos colectivos salieron especialmente perjudicados. El rescate pasó por encima de los desahuciados que perdieron sus hogares y de los que fueron despojados de una parte vital de sus ahorros mediante las preferentes y obligaciones subordinadas. En la mayoría de estos casos se trataba de personas humildes y con escasos conocimientos.