• 03/10/2025 19:54

Jóvenes pastoras, una dura forma de vida que «atrapa»

(origen) Nora Sesmero Feb 12, 2025 , , , , , ,
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Por Nora Sesmero

Madrid, (EFEverde).- Zuriñe y Celia son dos jóvenes pastoras que disfrutan de «hacer felices a las ovejas» y que tienen claro que no volverán a la ciudad a pesar de las malas condiciones laborales, el machismo que sufren en algunos territorios, el bajo salario o la ausencia de apoyo por parte de las instituciones.

Zuriñe, madrileña de 27 años, y Celia, de 30 y nacida en Donosti se conocieron mientras participaban en un proyecto para la recuperación de la trashumancia en Palencia.

Celia estudió Ciencias de la Agricultura Ecológica en Alemania y una «atracción inevitable» la llevó a realizar un curso de pastoreo. Zuriñe estudió biología y se empezó a interesar por la agroecología, lo que la condujo a formarse en el mismo oficio en un curso en El Boalo (Madrid).

Desde entonces se enamoraron de la profesión y actualmente trabajan entre Austria, Suiza y España por temporadas.

Las pastoras decidieron empezar a comunicar en redes sociales cómo es su trabajo a través del perfil de Instagram «Pastoras nómadas» para «compartir con la gente joven y apoyar la educación ambiental».

No hay vuelta atrás

A pesar de la dureza de su trabajo por las condiciones meteorológicas que enfrentan y el esfuerzo físico que realizan, ambas destacan las “alegrías” de las que disfrutan cada día gracias a su profesión por el trato con los animales y sus compañeras de pastoreo y la “sencillez” de su estilo de vida.

«Si trabajas con bichos tienes que mirarlos y sentirlos», Zuriñe destaca la diferencia entre su vivencia y la “superficialidad de la ciudad” por el individualismo que se genera a causa de la falta de desconexión del «mundo digital».

“No hay retorno posible a la ciudad”, expresa Celia.

Además, Zuriñe observa como un desafío que el consumidor está “muy alejado de cómo se produce lo que comemos”. Aunque ella se siente realizada cuando cuida «a lo que me va a cuidar a mí” a través de la alimentación.

Desafíos que enfrentan las mujeres pastoras

“Trabajo en Austria y vivo en España”, así resume Zuriñe su situación de precariedad. La pastora trata de buscar en países europeos un sueldo más alto que la proporcione una rentabilidad económica. Este reto del sector le achacan a un sistema de comercialización alimentario «dañino» para los productores por un modelo en el que “se fiscaliza a quien lo hace bien, en vez de a quien lo hace mal”.

Asimismo, destacan que, como mujeres, en algunos territorios han sufrido abusos por parte de algunas personas.

Por otro lado, resaltan que la cantidad de burocracia que tienen que formalizar impide el desarrollo satisfactorio de la labor pastoril. Al igual que con algunos “estándares” europeos que “son inmensos y te limitan la autonomía a la hora de tomar decisiones por tus animales. Al final nuestra labor consiste en cuidar de las ovejas y sentimos una presión muy grande por esos estándares rígidos, opresivos y poco adaptados a las realidades locales”, comparte Celia.

Además, manifiestan su preocupación por la pérdida de la trashumancia debido a la falta de mantenimiento de las cañadas y la decisión que han tomado algunos pastores de transportar a los animales en camión, perdiendo así la labor ambiental de la práctica.

Para la mejora del sector creen que es necesario devolver la toma de decisiones a nivel local, abrir espacios de diálogo entorno a las anteriores cuestiones, introducir a profesionales de la ganadería tradicional para ofrecer formación a otros ganaderos, así como un apoyo económico por parte de las instituciones destinada al desarrollo de pastoreo extensivo. EFEverde

nsa / atm

 

 

 

 

 

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Artículo de Nora Sesmero publicado en https://efeverde.com/jovenes-pastoras-disfrutan-hacer-felices-ovejas-par-enfrentan-diversos-desafios/