Los criminales apuntan sobre todo con campañas de ‘phishing’, además de ‘malware, ‘ransomware’, robo de credenciales, manipulación de registros DNS, ‘deepfakes’ y ataques de intermediario.
Los criminales apuntan sobre todo con campañas de ‘phishing’, además de ‘malware, ‘ransomware’, robo de credenciales, manipulación de registros DNS, ‘deepfakes’ y ataques de intermediario.